Yo nunca dejo nada al azar

Sobre mi futuro, yo nunca dejo nada al azar.

Ring, ring... 6:15 a.m., volteo alrededor, estoy en mi cama, suena el despertador, de nuevo lunes. Me gustan los lunes, pienso. Me pongo de pie e inicio el día con el pie derecho. Volteo a mi alrededor, observo cada uno de los artículos que decoran mi recámara y que me dicen quién soy y en dónde he estado. Veo la foto de cuando me gradué de la universidad y otra de mi primer trabajo donde aprendí tanto. Al ver esto me doy cuenta de que soy el resultado de mis pasos firmes, aunque a veces tema.

6:23 a.m. Tengo ojeras y la marca de un libro en mi cara. Me veo al espejo y pienso que en la regadera dejaré ir el cansancio, me bañaré para despertar e iniciar de nuevo.

6:30 a.m. Mis ojeras forman parte de esta vida multitask que me gusta vivir y que me deja cansada. Pero, como me gusta, entonces soy mi propio coach para darme ánimos y creer en lo que hago, eso me ayuda a lograr mis metas.

6:45 a.m. Pienso mientras me preparo mi huevo con aguacate y queso panela, que esto también es un trabajo en equipo. Coincidir con otras personas para lograr metas en común hace más llevadero este camino y me alegro de poderlo hacer.

7:00 a.m. Salgo de casa, entro al tráfico, pongo música, reflexiono sobre las 5 inteligencias del futuro: disciplina, síntesis, creatividad, ética y compresión, como dice el psicólogo Howard Gardner. Mi inteligencia de la comprensión tiene que trabajar en este momento, y aprender a vivir tanto tiempo dentro del automóvil.

7:15 a.m. Recibo llamadas, manejo, trazo una lista de pendientes en mi cabeza y estos crecen como una montaña sobre mi escritorio. Y es que dicen que siempre hay que pedirle las cosas a la gente que está ocupada porque siempre se harán tiempo para hacerse cargo de todo.

8:00 a.m. Otra vez en mi escritorio. Busco ser certera para tomar las mejores decisiones, dudo y busco el orden correcto.

8:15 a.m. Es otro día, un nuevo inicio, la posibilidad de volver a empezar, ser independiente y libre a través de mi trabajo.

El trabajo es esencia; me defino a partir de lo que hago. Trabajar es diversión y es competencia conmigo misma. Es mi forma de ver la vida, trabajo para mejorar, trabajo para tener libertad económica, y para atrapar cientos de historias en mi memoria. Trabajo para aprender, para conocer y conocerme.

Yo, que nunca dejo nada al azar.

Yo, que a veces temo y sé que cada uno de mis pasos me ayudan a lograr mis metas.

Yo, que me canso y me pierdo.

Yo, que tengo mil tareas y otros tantos pendientes.

Yo, que confío en mí.

Yo no dejo nada al azar.

XOXO